A lo largo de más de cuatro décadas, Jaime Urrutia ha transitando por los altos y bajos de una carrera que comenzó en pleno auge de la movida madrileña. Como líder de Gabinete Caligari, Urrutia no solo ayudó a definir el “rock torero”, sino que también marcó una época como principal compositor de obras como Camino Soria. Por entonces, España transicionaba hacia una democracia, donde el rock era un género marginal, y Caligari se convirtió en la banda sonora de una generación que buscaba nuevas formas de expresión.
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“Yo confiaba en mis canciones, siempre he sido compositor de mi música, y eso me ha dado una base sólida”, comenta, reflexionando sobre su evolución a lo largo de los años. Tras la separación de Gabinete Caligari en 1999, Urrutia inició una carrera en solitario que consolidó con su álbum debut, Patente de Corso. Este proyecto le permitió explorar una nueva faceta artística y disfrutar de la libertad creativa que anhelaba tras casi dos décadas como cabeza del grupo.
La carrera de Urrutia ha estado marcada por un apego al pop rock clásico, influenciado por íconos como Elvis Presley, Bob Dylan y David Bowie. “No me actualizo para nada, sigo escuchando la música que me gusta”, asegura. Ahora, tras varios años de silencio discográfico, tiene la mirada puesta en lo que podría ser su último álbum. “Quiero grabar muy tranquilo, sin presión”, revela. Este capítulo final, lejos de ser un adiós melancólico, parece el broche perfecto para un artista que ha sabido mantenerse fiel a sí mismo y a su obra. Hablamos con el español, quien nos ha detallado un poco sobre su regreso a la música y su próxima presentación en el hotel Canopy by Hilton Madrid Castellana el 14 de diciembre.
Tu carrera empezó con Gabinete Caligari, ¿qué recuerdos tienes de la movida madrileña y cómo crees que influyó en la música española en las décadas posteriores?
Bueno, pues con Gabinete Caligari nos formamos en 1980, hace 44 años. Poco a poco empezamos grabando discos en una compañía independiente, o sea que lo pagamos nosotros o amigos nuestros que tenían dinero. Y en aquella época las grandes compañías de discos aquí se interesaban sólo por la música melódica, como Camilo Sesto y Julio Iglesias, y el rock estaba un poco infravalorado. Entonces pasó la famosa movida, que bueno, después de morir el general Franco, se formó una democracia en el país a finales de los 70, inicios de los 80. Recuerdo que había un garito de fumar, una sala que se llamaba El Rockola y en estos espacios empezó a haber mucho interés por la música, tanto del público como de críticos, de gente que sabía. Allí se hicieron miles de grupos y nosotros, bueno, dentro de lo que cabe, tuvimos la suerte de hacer una carrera a través de los años 80, de empezar a vender en una compañía independiente, empezar solo con mil discos vendidos hasta Camino Soria, que fue el que más éxito tuvo. Ese disco vendió 400.000 copias. Tuvimos suerte, hicimos miles de actuaciones y nos fue muy bien. Lo que pasó es que después, lógicamente, llegó otra generación, vinieron grupos cantando en inglés y pues aburres un poco a la gente de la misma cara, ¿no? Gabinete Caligari se separa, lo decidí yo pues yo era el cantante, guitarrista y compositor. Y en el año 2002 empecé una carrera en solitario con un disco que se llama Patente de Corso. Y he seguido junto a un público fiel que me sigue y me quiere. Vamos, no soy un artista súper conocido, pero tengo gente que me quiere.
Después de la disolución de la banda, ¿cómo enfrentaste el reto de redefinir tu carrera como solista?
Tuve que luchar. Tenía ya cierto crédito entre las compañías de discos. La mía era una que se llama DRO, había gente que me conocía y me animaba a sacar un disco en solitario. Y fue bien la cosa. Empecé a hacer giras en solitario y pues porque también tenía ganas de lanzarme a eso. Estuve con Gabinete Caligari 18 años, casi 19, hasta el año 99. Y bueno, pues también te gusta tocar con otra gente y tenías ganas de hacer una carrera solitaria y no tener siempre que depender de un grupo, juntar ideas y estar de acuerdo. Creo que tenía edad suficiente, experiencia y caché, digamos, como para hacer mi propia carrera.
¿Sentiste en algún momento presión por mantener el legado de Gabinete Caligari?
No mucho. Afortunadamente soy compositor de mis canciones, entonces tengo un buen bagaje. Yo sé que tengo un repertorio muy conocido, como 20 canciones mías son muy conocidas aquí en España. Y bueno, confío en ellas. Yo ante todo me considero un buen compositor, cantante… Aprendí a cantar porque al principio prácticamente no sabía, pero bueno, tengo oído y confío en ello. En ello seguí y me va bien.
Precisamente con cuatro álbumes en tu haber como artista en solitario, ¿cómo ha evolucionado tu música a través de los años?
Yo tengo una voz muy particular que se reconoce mucho y evolucionar… tampoco mucho. A mí me gusta mucho el pop rock clásico, el rock clásico de toda la vida: Elvis Presley, Bob Dylan, los Beatles, Rolling Stones, los Doors, Lou Reed, Bowie y sigo escuchando esa música. No estoy al tanto de la música moderna, no me actualizo para nada. De vez en cuando escucho una canción que me gusta, pero no estoy muy al tanto de lo que pasa en la música moderna.
A finales del 2023 rompiste tu silencio discográfico con sencillos junto a Doctor Explosión. ¿Cómo fue regresar a la música?
Fue una cosa que el cantante Jorge Explosión, se llama, tiene un estudio en Gijón donde yo grabé mi último disco de estudio y lo grabé con él. Entonces en las sesiones quedaron algunas cosas que hicimos juntos y el año pasado me dijo: “mira, los voy a sacar como singles a ver qué pasa”. Y bueno, tuvo bastante aceptación, me gusta.
¿Por qué te has alejado de hacer lanzamientos? ¿Qué ha pasado en esta década desde tu última entrega?
Digamos que el rock o la música que hago yo en España, bueno, yo creo que en el mundo entero, ya no suena tanto. Los jóvenes no escuchan demasiado rock como pasaba en los años 80 o 90, que había más público. Y simplemente ya te digo que no soy un artista que venda mil millones de discos, ni haga súper giras conocidas, pero tengo mi público fiel y sé que ahí se aprecia mi música. Con eso me contento, vamos. A veces compongo algunas canciones y me junto con la gente en grupo. Si hay un productor que me gusta, trabajo en ellas y sacamos alguna cosa. El LP ya prácticamente se pasó de moda. El disco de vinilo ya está muy pasado de moda y bueno, pues sí, he tenido suerte. Considero que en mi carrera he visto pasar de todo. El primer disco de Gabinete era un EP compartido con otro grupo y he vivido toda la evolución desde el CD al internet. Cuando empecé en el año 80, el mundo no tenía nada que ver absolutamente con lo que hay ahora. Y bueno, me considero un afortunado porque he vivido un cambio en los medios y en todo, impresionante.
¿Y tienes planeado trabajar en un nuevo material?
Sí, pero ya te digo, o sea, tampoco tengo una presión muy grande. Cuando tenga ya hechas como seis canciones para un nuevo disco, las quiero grabar muy tranquilo, muy relajado, no tengo ninguna presión. Quiero hacer un disco nuevo y quizás retirarme, porque creo que ya he dado mucho.
Claro, como el gran cierre.
El gran cierre, sí. Eso es lo que me gustaría: hacer un disco muy bueno y retirarme. Uno ya no tiene 20 años.
Próximamente te vas a presentar en el hotel Canopy by Hilton Madrid Castellana, ¿qué nos puedes contar del espectáculo del 14 de diciembre?
Sí, en una sala pequeña. Es para poquita gente, pero algo muy elitista, digamos, como que es un club privado. Y bueno, he hecho varias galas antes. Es antes de Navidad y haremos todo un repaso a mi repertorio. Tanto de Gabinete como de mi carrera en solitario.
¿Tienes otros planes como artista o realmente solo te enfocarás en lanzar tu último álbum?
En principio me hace mucha ilusión, estoy muy ilusionado de sacar un disco. No sé si espero que sea el último o no, pero eso es lo que realmente me hace mucha ilusión. Sacar un disco que sé muy bien que le gustará a mis seguidores. Y bueno, irme de la música encantado porque he podido vivir de ella, es un lujo y es lo que más me gusta en la vida. No puedo pedir nada más.
