El amor, la música y la comunidad son los pilares de Siloé


Un año ha pasado desde que Siloé publicó Santa Trinidad, un álbum para el que la agrupación de Valladolid acomodó todas sus piezas y encontró su formación ideal. Ahora, el trío del cantautor Fito Robles, el guitarrista y productor Xavi Road, y el batería Jaco Betanzos celebra el primer aniversario de dicho trabajo con la edición Deluxe que contendrá dos temas adicionales: ‘Reza por mí’ y ‘Volverte a ver’. Originalmente, ambas canciones estaban previstas para ser incluidas en la versión original del disco, sin embargo, al final no pasaron el corte para preservar el concepto de “333” que se manejó para todo el lanzamiento.

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Al haber repasado las canciones que se habían quedado por fuera, el grupo se dio cuenta de que el ahora single ‘Reza por mí’ es el que más tiene que ver con el título de Santa Trinidad, además, parecía casi poético que una de las primeras composiciones que hicieron para su cuarta placa discográfica terminara por cerrar el ciclo. “Es como que tú sabes que estás guardando un tesoro”, dice Fito. “Me parece que ha sido muy acertado el hecho de habernos guardado el plato más rico del menú para el final de todo para que la gente lo degustara con tiempo y con cariño”.

El trío ha explicado que la llegada de la canción marca el inicio de una nueva era pero a pesar de que sí se encuentran trabajando en más música, Xavi aclara que esto no significa que Siloé ya esté lista para soltar su obra maestra. De todos modos, no se han cumplido ni dos años desde la salida de este LP, por lo que los músicos desean darle un poco más de tiempo para que el público continúe apreciándolo como lo merece. Esto también va de la mano con la mentalidad de querer ir en contra del ritmo tan acelerado que se está manejando en la industria musical y las presiones que recaen sobre los músicos para publicar canciones constantemente.

Cortesía prensa

“Lo poco que tenemos en nuestro control, en nuestra manos, es dosificar cómo vamos sacando nuestro material y cómo se lo das a tus fans, a la gente que te quiere, que te escucha”, comenta Fito. “También por nosotros mismos porque al final cuando tú sacas un álbum, toda la energía que vuelcas en el lanzamiento es bestial, y luego estás tocando el directo y eso lo tienes que transmitir”. Justamente el show en vivo de Siloé es uno de los más atractivos que hay actualmente en España pues ha sido construido de manera “cinematográfica”, es decir, como si tuviera diferentes actos que permiten que su público se vaya envolviendo progresivamente dentro de la historia. Fito y Xavi concuerdan en que probablemente esto se haya visto influenciado con su pasado, cuando hacían bandas sonoras para cortos, pero también proviene de la experimentación que la agrupación ha hecho con el pasar de los años.

Cuando Siloé comenzó a mediados de los 2010, se trataba del proyecto musical de Fito como solista y, como tal, publicó el LP debut La verdad, en donde las canciones evidenciaban tintes folk y de música de autor. Luego, Xavi llegó para ser el nuevo miembro permanente y juntos presentaron La luz (2018), un disco que contaba con la presencia de más guitarras eléctricas y un sonido más indie rock. Ya para 2020, año en el que llegó Metrópolis, el grupo parecía haberse definido como un dúo cuya propuesta para ese año incorporaba sintetizadores que le brindaron un enfoque más pop pero sin perder su identidad rock. Este pasado tan diverso les condujo hacia Santa Trinidad, trabajo que terminó por consolidarles como un trío junto al batería Jaco Betanzos y que reunió todos los aprendizajes que Siloé había tenido hasta ese momento.

“Es el disco de nuestras vidas, esa es la realidad, y es el disco que ha hecho que nuestra vida cambie radicalmente”, sostiene Fito. Gracias a este álbum, explican los músicos, han podido llegar a oídos de Latinoamérica y sumar fanáticos en países como México, Chile y Argentina. A nivel España, su gira actual les ha llevado de visita por ciudades como Málaga, Albacete, Sevilla, Barcelona, Bilbao y Madrid, entre muchas otras, donde han agotado la mayoría de sus fechas. “El llegar a más gente ha condicionado el hecho de que nuestra vida se torne exclusivamente ya en la música y, bueno, llegar a los corazones de las personas, que eso es lo más bonito. Creo que las canciones tienen esa fuerza y ese poder”, añade el frontman.

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Desde sus inicios, y así como le sucedió a Evanescence en los 2000, a Siloé se le ha confundido como una banda cristiana, pero aunque los títulos de varias de sus canciones y el mismo nombre de la agrupación son referencias bíblicas, sus miembros han reiterado que su música no es de alabanza y que está abierta para que cada quien le dé su interpretación personal. Esta cualidad ha permitido que algunas de sus canciones, en palabras que han escuchado de sus mismos fans, sirvan de aliento en situaciones difíciles o también para reflexionar independientemente de las creencias de cada quien. “Obviamente dentro del grupo hay una creencia y unas inquietudes espirituales que se reflejan en las letras, [pero] lo que buscamos no es ni mucho menos evangelizar a nadie, sino todo lo contrario, que la gente se haga preguntas”, señala Xavi.

Para Xavi, Jaco y Fito ha sido impresionante el impacto que su música ha tenido en miles de personas, pero no dejan de mantener los pies sobre el suelo ya que dicen que si comienzan a pensar mucho en ello y en convertirlo en su objetivo, perderán la intencionalidad y naturalidad de sus composiciones. Y es que más allá de los logros materiales o que se pueden contabilizar –que también agradecen profundamente–, para Siloé lo más importante es el amor por la música y la comunidad que se construye alrededor de ella. Por eso el éxito para Jaco tiene que ver con llegar al corazón de las personas, y si eso se ve reflejado en crecimiento para la banda, ya es un plus. “Yo considero éxito que dentro de muchos años estemos aquí creando, regalando música a la gente, creando sensaciones, compartiendo”, opina.

Los tres concuerdan con Xavi en que su deseo es continuar juntos para “crear algo mucho más grande de lo que podría hacer cada uno por separado”, claramente manteniendo viva la chispa para evitar convertirse en un proyecto que únicamente está unido por el dinero. A su vez, esperan que las bandas de ahora continúen existiendo y que cada vez se vayan formando muchas más para contrarrestar el individualismo latente en la industria. Aunque, por lo menos en España, la escena musical ha tomado la delantera y el trabajo colectivo entre artistas y grupos ha dado origen a iniciativas solidarias de las que el trío también ha sido partícipe como conciertos y subastas creados para ayudar a Valencia.

En cuanto a su futuro cercano, Siloé continuará adelantando su Santa Trinidad Tour, cuyas entradas se han vendido como pan caliente, y el 22 de noviembre llegará la edición deluxe del disco que les permitió trascender como banda.

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